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  • Los médicos privados que atienden en la Clínica Villa Fontana, al igual que los propietarios del colegio internacional Mont Berkeley, fundado en Costa Rica años atrás, son inquilinos de la propiedad de casi 5 manzanas de extensión, que fue confiscada en 1985 y que perteneció al Estado hasta el 21 de abril de 1990.

Roberto Fonseca L. [email protected]

En la Clínica Villa Fontana, los trece profesionales de la salud —doce médicos y un odontólogo— que mantienen su consulta privada en ese local, pagan una renta mensual a los “propietarios” del inmueble que perteneció al Estado, una sociedad anónima representada por Ricardo Bonilla, asistente de Bayardo Arce Castaño.

El Dr. Fulgencio Báez, pediatra y coordinador del grupo de médicos que renta el local, confirmó que ellos mantienen con los dueños una relación contractual en calidad de inquilinos, al igual que el colegio Mont Berkeley.

Doctor Báez, la propiedad denominada Clínica Villa Fontana fue “donada” por la FACS a una sociedad anónima, en la que aparecen como propietarios varios médicos que trabajaron con la Revolución Sandinista. ¿Usted es propietario de acciones?

A un grupo de médicos nos vendieron acciones, las compramos, me imagino que por eso aparecemos como socios de eso. Ese ha sido nuestro papel, nada más. Incluso, en este momento nosotros alquilamos el local de la Clínica, pagamos una mensualidad, igual que una escuela que hay ahí, que se llama Mont Berkeley.

¿Y quién se los alquila doctor?

Yo me entiendo con un señor que se llama Ricardo Bonilla. Él firma a nombre de una empresa, no recuerdo el nombre, él actúa como representante del dueño, con él mantenemos la relación contractual.

¿El alquiler lo pagan todos los médicos o cada uno paga por la Clínica que ocupa?

No, participamos todos. En la firma del contrato asumimos responsabilidad sobre eso, creo que seis personas, yo participo como coordinador por parte de los médicos, pero ahí entre todos recogemos la plata para estar pagando. Así se trabaja en esa Clínica, somos inquilinos.

Eso que me decís de acciones, creo que fue en el 91 ó 92, no preciso. Nos ofrecieron las acciones y las compramos, era una forma de permanecer ahí. Pero hasta ahora no tenemos idea de cómo está esa propiedad.

O sea, ¿el hecho de tener acciones no significa que quedarían como codueños de la propiedad?

No, nos ofrecieron acciones para la Clínica, cuando era un proyecto más ambicioso, con hospitalización y todo eso. Pero, hay gente que tiene acciones y se fue… montaron su propia clínica o se fueron a su casa, como el Dr. Morín, uno de los fundadores.

Ahora hay varios médicos que están en la Clínica y no poseen acciones. La verdad es que no hay ninguna diferencia entre los que tienen y no tienen acciones, con respecto a los deberes en la Clínica.

¿Y cuánto tienen que pagar como renta mensual?

Fijate que la renta es favorable, porque creo que estamos pagando como 1,500 dólares. No estoy muy seguro con la cifra, tenemos una administradora en la Clínica que nos ayuda en esas cosas, recoge el dinero, y está pendiente de pagar a tiempo los recibos de agua, luz…

¿Ustedes, entonces, no le rentan al colegio?

No, ellos no tienen que ver nada con nosotros, ésa debe ser una relación contractual similar a la de nosotros, supongo que debe ser con el mismo Ricardo Bonilla. Nosotros alquilamos únicamente la parte donde están las consultas, las clínicas, el resto lo alquilan al colegio.

Sobre la situación legal de la propiedad, ¿tiene alguna información?

No, no estoy enterado sobre la situación legal. Allá hay médicos y odontólogos interesados en comprar el área de la consulta, así que me comuniqué con Ricardo Bonilla y le dije que había interés en adquirirla, y me dijo que había una parte no sujeta a reclamo. Creo que la parte en reclamo es la que pertenecía al Gral. Gustavo Montiel, la parte de arriba, donde estaba el área original de la Clínica y que hoy ocupa el colegio.  

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