Montealegre prefiere meditar antes que bailar

Ludwin Loáisiga López

No baila. Tampoco toma licor. Eduardo Montealegre planea recargar baterías en plan de meditación esta Semana Santa, así como reunirse con algunos contactos políticos y acabar de leer La Riqueza de las Naciones, de Adam Smith, padre del liberalismo económico.

Montealegre espera recobrar energías esta Semana Santa pues libra una batalla a lo interno del Partido Liberal Constitucionalista (PLC), para que se efectúen elecciones primarias al momento de escoger al candidato presidencial de esa organización, dirigida por el reo Arnoldo Alemán.

Montealegre se ha enfrentado a distintas pruebas de fuego durante una travesía que en los tres primeros meses del año ha tomado una modesta fuerza: su pretensión de convertirse en el candidato presidencial del PLC.

Una de las dos figuras políticas con mayor popularidad, según las más recientes encuestas realizadas en Nicaragua, Montealegre, dijo que no toma ni baila, por lo que durante la Semana Mayor se dedicará a escuchar “lo que dice el pueblo”.

Entre risas dijo que está a “dieta”, aunque dispuesto a gozar de una de sus comidas favoritas, el pescado de Semana Santa.

En su etapa de descanso, sin embargo, aprovechará para “pensar, meditar y ver qué vamos a hacer”.

Se refiere a la disputa que entabló con la cúpula del PLC, la cual se opone a celebrar elecciones primarias. Miembros del Comité Ejecutivo Nacional del PLC, como Wilfredo Navarro, sostienen que Montealegre efectúa campaña para otros partidos.

Montealegre defiende su posición y recuerda siempre el artículo 84 de los estatutos del PLC, el cual establece las primarias.

“La candidatura a la Presidencia de la República deberá surgir de elecciones internas primarias”, dice el artículo 84 de los principios y estatutos del PLC. “Vamos a estar tranquilos”, finalizó Montealegre, banquero y precandidato presidencial.