Padres piden a la Policía les informen dónde fue sepultado su hijo

Hernán Sevilla Dávila y Gladys Altamirano, padres de Wilfredo Dávila Altamirano, demandan que las autoridades de la Policía expliquen las circunstancias de la muerte de su hijo, ocurrida presuntamente el pasado 20 de enero, en el sector de Mulukukú.

Sevilla y Altamirano denunciaron en el Centro Nicaragüense de Derechos Humanos (Cenidh) que dos días después, tras haber sido informados del deceso de su vástago a través de una llamada telefónica, se presentaron a la Policía de Siuna, pero allí les informaron que ya habían sepultado el cuerpo.

Sevilla indicó que las autoridades no le brindaron explicación sobre las circunstancias en que murió su hijo, además se negaron a decirle donde lo sepultaron.

Sevilla refirió a las abogadas del Cenidh que al llegar al sitio donde supuestamente había muerto su hijo, un policía únicamente le mostró fotografías tomadas con la cámara de un teléfono celular en las que aparece Wilfredo, ya fallecido, vestido de ropa camuflada y en la que se aprecia un disparo en la frente.

El hombre dice que su hijo había salido de su casa hace dos meses, aparentemente a trabajar en cortes de café y que desconocen que anduviera en algún grupo armado.

Marjourie Rodríguez, abogada del Cenidh, criticó que después de un mes la Policía no explique a la familia las circunstancias de la muerte de su pariente. A su vez, apuntó que los padres tienen derecho a conocer donde está la tumba de su hijo.