Ajuste del salario mínimo de más de 140 mil trabajadores de zona franca aún sin negociarse

El 70 por ciento de la producción textil se vende a Estados Unidos y ese es el motivo por el cual los sindicalistas están inquietos ante una posible recesión en ese país en el 2023

Ajuste del salario mínimo de más de 140 mil trabajadores de zona franca aún sin negociarse

A tres meses para que venza el salario mínimo vigente en zona franca, las negociaciones para el acuerdo quinquenal de ajustes aún siguen en veremos. La posible recesión en Estados Unidos a partir del 2023 y las posibles reducciones de compras por parte de marcas de ese país, tienen en el limbo el inicio de las conversaciones, que posiblemente arrancarán hasta el próximo mes.

El salario mínimo vigente desde enero de este año vencerá el próximo 31 de diciembre y para entonces el sector privado, los sindicalistas y el Gobierno deberán lograr un acuerdo para aplicar a inicios del 2023 el ajuste salarial, el cual se ubica actualmente en 7,498.46, luego de haberse ajustado en 8.25 por ciento.

Pedro Ortega, secretario general de asuntos laborales de la Confederación Sindical de Trabajadores de Zonas Francas, dijo que el sector privado está a la espera de que las marcas en Estados Unidos concreten las compras para el próximo año, lo cual apunta a una recesión en ese país.

“Hay negociaciones con las marcas y las empresas para el próximo año, entonces imagino que la recesión económica en Estados Unidos, los alimentos están caros, el petróleo ya ni se diga de caro, me imagino que habrá menores compras de productos textiles, entonces me imagino que para el próximo año va a haber menos órdenes de trabajo en zona franca, por eso es que creemos que en noviembre puede haber una perspectiva más clara”, dijo Ortega.

El Fondo Monetario Internacional prevé que la economía de Estados Unidos crezca 1.6 por ciento, pero el próximo año será de apenas 1 por ciento, aunque algunos analistas internacionales han advertido que dicho país va rumbo a una recesión como consecuencia de la elevada inflación y los incrementos drásticos de las tasas de interés, que se espera se mantengan.

En Nicaragua, el 70 por ciento de la producción textil se vende en Estados Unidos y ese es el motivo por el cual los sindicalistas están inquietos y no ven a China, que también es un gran exportador de textiles, como alternativa de mercado, porque creen que para desarrollar ese mercado falta mucho camino por recorrer.

Hasta julio de este año, según datos del Banco Central de Nicaragua, un total de 140,866 personas estaban laborando en zona franca, bajo la nómina de 187 empresas. Este número de contrataciones es superior a diciembre pasado, cuando habían 132,076.

Ortega dijo que al finalizar este año esperan que en promedio se hayan creado 10,000 empleos más y que el próximo año dependerá de las contrataciones de las marcas, aunque aclaró que hay algunas maquilas coreanas, canadienses y chinas que están en proceso de ampliación.

A diferencia de las otras actividades económicas, que también están dentro de la tabla del salario mínimo del Ministerio del Trabajo, zona franca negocia su ajuste de manera trienal o quinquenal, una modalidad que se adoptó para dar certidumbre a los inversionistas.

“La preocupación para todos es que haya reducciones en las órdenes de trabajo por la recesión de Estados Unidos, que me imagino que en el primer semestre va a haber problema de recesión y en la segunda mitad mejoría, más el factor de la guerra en Ucrania, que también eso no deja de tener efectos en los precios del combustible, en la cuestión de los fertilizantes, entonces hay factores que se esperan para el próximo que acá afectan en las órdenes de pedido de las marcas para las empresas”, enfatizó.

Sobre China dijo que el acuerdo de Cosecha Temprana se espera que esté vigente en diciembre, “pero ahí no creo que tengamos muchas expectativas como la que se tiene con Estados Unidos, que es el principal mercado de zona franca de Nicaragua”.

“Tal vez en los próximos años mayor intercambio de China”, afirmó Ortega, agregando que algunas marcas han empezado a reducir sus compras a Nicaragua, incluso antes de que Estados Unidos caiga en recesión.

Ortega dijo que otro factor que será determinante en las negociaciones en noviembre será el costo de la canasta básica, que en Nicaragua supera los 17,000 córdobas.

Las exportaciones acumuladas a junio del sector textil sumaron 1,091.2 millones de dólares (836.7 millones en 2021), lo que se tradujo en un incremento de 30.4 por ciento en valor y un incremento de 19.3 por ciento en términos de volumen. Estas exportaciones tuvieron como principales mercados de destino: Estados Unidos (74.3 por ciento del total), Honduras (19.9 por ciento) y Guatemala (2.3 por ciento), según datos del Banco Central de Nicaragua.