Diputados de la dictadura presentan reforma a la Ley Electoral, a 12 días de la farsa municipal

Iniciativa de ley también es para permitir el uso de las cédulas con fechas vencidas el 6 de noviembre.

Diputados de la dictadura presentan reforma a la Ley Electoral, a 12 días de la farsa municipal

Los diputados del partido gobernante Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN) presentaron este lunes 24 de octubre una iniciativa de reforma a la Ley Electoral (Ley 331), para que todos los ciudadanos nicaragüenses sean incorporados al Padrón Electoral el 6 de noviembre que se realizarán las votaciones municipales, controladas por el régimen de Daniel Ortega.

También establece la vigencia por un día de las cédulas de identidad con fechas que caducaron, para que se usen en la votación.

La propuesta se denomina “Ley Especial para la Vigencia de las Cédulas de Identidad vencidas a fin de ejercer el Derecho al Voto en las Elecciones Municipales del 6 de noviembre de 2022 e incorporación y Activación de los y las Ciudadanas Cedulados al Padrón Electoral”.

El texto precisa que “tiene como objeto disponer la vigencia de las Cédulas de Identidad Ciudadana para todos aquellos ciudadanos y ciudadanas con cédula de identidad vencida, únicamente para garantizar el derecho al sufragio universal”. Luego establece “reformar el artículo 184 de la Ley 331, Ley Electoral, para que todas las ciudadanas y ciudadanos cedulados puedan incorporarse al Padrón Electoral, inclusive el día 6 de noviembre”.

La iniciativa solicita que “se le dé el trámite correspondiente del proceso de formación de ley”, lo que significa que será enviada a la comisión correspondiente, para su consulta y dictamen.

Trámite habitual cada año de votación

Este trámite es habitual cada año electoral, debido a que no todos los ciudadanos cuentan con un documento de identidad nicaragüense actualizado o renovado.

En teoría, las votaciones del próximo domingo 6 de noviembre son para elegir alcalde, vicealcalde y concejales en los 153 municipios del país, sin embargo, en Nicaragua los procesos electorales no tienen credibilidad, porque son controlados por el partido gobernante FSLN, que lidera Daniel Ortega y su esposa y cogobernante, Rosario Murillo.

El régimen orteguista no permite la participación de la oposición en los comicios. En actual contexto político, destacados opositores fueron encerrados y acusados de delitos inventados, para evitar su participación en las votaciones presidenciales de 2021.

En la Asamblea Nacional, el régimen Ortega Murillo también tiene el control con los 75 diputados sandinistas, de un total de 91, por lo que no tienen problemas para aprobar las leyes que envía el Ejecutivo o presentan ellos mismos.