Repatrian restos del nicaragüense que murió bajo custodia del ICE
Melvin Calero Mendoza falleció el pasado 13 de octubre mientras permanecía bajo custodia del ICE en un centro de detención de Aurora, Colorado, Estados Unidos

Los restos del nicaragüense Melvin Ariel Calero Mendoza, quien falleció el pasado 13 de octubre mientras permanecía bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés), llegaron a su natal Río Blanco, Matagalpa, donde su familia pudo darle el último adiós.
Mientras tanto, en Estados Unidos organizaciones defensoras de los migrantes empujan una campaña para exigir una investigación minuciosa del caso y el cierre del centro de detención del ICE en Aurora, Colorado, donde Calero permanecía desde el 2 de mayo de este año. El pasado 13 de octubre lo encontraron desmayado en su celda. Lo trasladaron al Hospital de la Universidad de Colorado en Aurora, Estados Unidos, donde murió pocas horas después. Así lo informó el ICE a través de un comunicado.
Calero Mendoza tenía 39 años y según reportes periodísticos llegó a su pueblo natal el pasado martes 22 de noviembre, donde familiares y amigos le dieron el último adiós. Él había salido de Nicaragua hace más de ocho años rumbo a Panamá donde vivió con uno de sus cuñados.
Pero a inicios de este año decidió trasladarse a Estados Unidos en busca de un mejor trabajo y mejores ingresos, sin embargo, lo detuvieron al cruzar la frontera y fue trasladado al centro de detención del ICE en Aurora, Colorado, el 2 de mayo. Una semana antes de su muerte un juez de Inmigración emitió una decisión escrita que ordenaba su expulsión.



Repatriación del migrante costó unos diez mil dólares
El traslado del cuerpo costó unos diez mil dólares que la familia recaudó a través de tres hablatones realizados en su natal Río Blanco. También se realizaron dos colectas a través de la plataforma GoFund, una de ellas promovida por la familia y la otra por dirigentes de la organización American Friends Service Committee (AFSC por su sigla en inglés).
La AFSC encabeza una cruzada para exigir una investigación que determine la causa de la muerte de Calero Mendoza, ya que él no padecía de ninguna enfermedad a la que pudiera atribuirse la muerte. También exigen el cierre del centro de detención del ICE en Aurora, Colorado. La demanda cuenta con el apoyo de varias organizaciones defensoras de los derechos de los migrantes, grupos de abogados y dirigentes políticos.
A Calero Mendoza le sobrevive su madre Lucía Mendoza y dos hijos, uno de 7 años y otro de 15. Tal como lo hace la AFSC en Estados Unidos, su madre y restos de familiares también exigen que se determine la causa de la muerte y que se haga justicia.