Últimos nicaragüenses desterrados saldrán de hotel en Virginia este martes
Desde que arribaron a EE. UU., el 9 de febrero, los familiares de algunos presos políticos llegaron a traerlos y así han salido gradualmente

La voluntaria de la organización humanitaria Alianza Nicaragüense Americana por los Derechos Humanos (NAHRA, por sus siglas en inglés), Anita Wells, precisó este lunes 13 de febrero que solo 11 nicaragüenses quedan en el hotel de Virginia que alojó a los 222 excarcelados políticos desterrados de Nicaragua por la dictadura de Daniel Ortega y su esposa, Rosario Murillo.
De ese grupo de 11, ocho viajan este mismo lunes a las casas donde serán recibidos por familiares o personas que se ofrecieron para alojarlos, debido a que algunos no tienen ningún familiar en Estados Unidos. A la vez, estos ocho se quedarán en el área de Maryland, vecina de Virginia.
Los tres nicaragüenses restantes se quedan todavía en el hotel bajo observación médica, porque sus problemas de salud son graves, pero también dejarán el hotel en las próximas horas. Solo una ex presa política se quedará una noche más, hasta el martes 14 de febrero.
“Ya con esto se termina lo que es la fase de la responsabilidad del Departamento de Estado (Estados Unidos) en el hotel, ya que todos ellos han sido enviados a sus familias y a las personas que los están apoyando”, dijo Wells.
Desde el mismo día que arribaron a Estados Unidos, el jueves 9 de febrero, los familiares de algunos presos políticos llegaron a traerlos al hotel, y desde entonces han estado saliendo gradualmente.
Cuando termine el traslado de los 222, Wells dijo que el siguiente paso es mantenerse en contacto con todos los desterrados para darles asistencia médica y psicológica a quienes lo necesiten, y asegurarse que se adapten e integren a su nueva forma de vida en Estados Unidos.
“Ahora comienza el trabajo real, asegurarnos que todos estos muchachos y todas estas personas estén adaptándose y sobreviviendo en este país, porque por la experiencia que tenemos después de un mes, después de 15 días, se encuentran en todo esto desconocido, se deprimen y sufren muchísimo”, manifestó Wells.
Estos 222 opositores que estaban presos en diferentes cárceles de Nicaragua por manifestarse en contra de la dictadura Ortega Murillo fueron enviados a Estados Unidos el jueves 9 de febrero, en un acto sin precedente en la historia política del país, lo que también significó una acción humanitaria de la Administración de Joe Biden que hizo posible el traslado aéreo a Washington a través de un vuelo privado. Además les brindaron asistencia médica, económica y alojamiento en un hotel.
El régimen Ortega Murillo le quitó la ciudadanía nicaragüense a estas 222 personas y las expulsó del país bajo una condición de deportación. Sin embargo, para los críticos esto significa un destierro de opositores y otra acción autoritaria y violatoria de los derechos humanos de la dictadura.