Estas son las dos actividades económicas que aún se tambalean en Nicaragua, según el Gobierno
El Índice Mensual de la Actividad Económica terminó con un crecimiento menor al 4 por ciento el año pasado. Estas son las actividades en caída y en crecimiento

Casi todas las actividades económicas cerraron el año pasado en crecimiento. El Índice Mensual de la Actividad Económica (IMAE) finalizó con un crecimiento de 3.9 por ciento promedio anual, ligeramente menor al 4 por ciento esperado por el Gobierno y las previsiones del Fondo Monetario Internacional (FMI). Este indicador suele reflejar por adelantado el comportamiento del Producto Interno Bruto, cuyo dato final aún no ha sido divulgado por el Banco Central.
La construcción y el pecuario fueron los sectores que hasta el año pasado continuaron en recesión, especialmente la primera actividad económica descrita, la cual se había recuperado por el aumento de la inversión pública enfocada en la reconstrucción de los daños ocasionados por los huracanes Iota y Eta.
A diciembre, el IMAE de la construcción cayó 7.9 por ciento, luego de contraerse 10 por ciento en el último mes del año. “Este comportamiento se vio reflejado en menor producción de materiales de construcción, principalmente en: adoquines, bloques, arena, madera, concreto premezclado, asfalto, cemento, piedra cantera y piedra triturada”, explicó el máximo órgano bancario.
Es decir que debido a que hay menos proyectos en ejecución, las empresas proveedoras de materiales de construcción ven afectado su dinamismo, lo que daña el IMAE del sector.
Esto está en línea con la situación que atraviesa la construcción privada. Datos actualizados hasta septiembre del año pasado muestran que en el segundo y tercer trimestre la construcción privada se contrajo profundamente. En el segundo cayó 9.4 por ciento y en el tercero 34.8 por ciento, mientras que en el primero creció 17.5 por ciento. Esto ocasionó que el promedio anualizado hasta ese periodo se ubicara en 1.1 por ciento negativo.
Solo en el tercer trimestre (julio-septiembre), “el área efectivamente construida en Managua registró una disminución interanual de 46.1 por ciento (-19.7 en el trimestre anterior), explicado por las disminuciones observadas en los cuatro destinos de la construcción: residencial, comercio, servicio, e industria”.
No obstante, en el interior del país, donde la inversión no tiene peso significativo en la formación del indicador del sector, el área efectivamente construida creció 14.6 por ciento (24.2 por ciento en el trimestre anterior), explicado por los aumentos observados en las edificaciones industriales y en las obras residenciales.
Según datos del Instituto Nacional de Información de Desarrollo, en el área efectivamente construida de viviendas de interés social, en el tercer trimestre se reportó una caída de 43.1 por ciento con relación al trimestre anterior.
Una segunda actividad económica en contracción fue la pecuaria, que finalizó el año con una caída de 0.6 por ciento, pese a que en diciembre creció 0.9 por ciento. En diciembre, este sector reportó mayor matanza avícola y porcina, y aumentos en la producción de leche y huevos, pero no a volúmenes suficientes para evitar la contracción anual.
Los principales en crecimiento
A excepción de la construcción y el pecuario, el resto de actividades cerró en crecimiento. La agricultura repuntó 3.3 por ciento, tras crecer 7.7 por ciento en diciembre, mes en que hubo mayores labores y producción en los cultivos de frijol, arroz, sorgo, maní, ajonjolí, tabaco, café, entre otros.
La explotación minera y cantera creció 10 por ciento en diciembre, para un promedio anual de 3.3 por ciento. En diciembre hubo mayor extracción de oro, plata, hormigón, material selecto, cal, carbonato y sal.
Por su parte, la actividad de comercio aumentó 4.6 por ciento (7.3 por ciento en el acumulado enero-diciembre), con crecimientos en el comercio al por mayor y comercio al por menor, según el Banco Central.
El sector de servicios de hoteles y restaurantes creció 25.4 por ciento en diciembre, para un promedio anual de 23.3 por ciento. El BCN no explica a qué se debió ese crecimiento, muy ligado al turismo, que en este momento solo se está beneficiando con el tránsito de cubanos.
La industria manufacturera repuntó 2.2 por ciento en diciembre, para un promedio de 5.6 por ciento. Entre las actividades que tuvieron mayor crecimiento se encuentran: lácteos, azúcar, tabaco, textiles, derivados de petróleo y arneses, entre otras.
Y finalmente la intermediación financiera se expandió 6.5 por ciento (5.7 por ciento en el acumulado enero-diciembre), este resultado obedece al crecimiento en la cartera de créditos y en la captación de depósitos, tanto en moneda nacional como extranjera, según el reporte del BCN.
Al respecto, el Fondo Monetario dijo que “los depósitos bancarios están aumentando, y han retornado los niveles observados antes de la crisis (en córdobas)”.
Además destacó la solidez de las reservas de capital y de liquidez del sector bancario y recomendó seguir apuntalando el sector financiero, lo que conlleva incrementar las provisiones para activos en dificultades, preservar las prácticas sólidas de financiación conforme se reactiva el crédito, reforzar el marco de preparación ante crisis y ampliar el perímetro de supervisión prudencial.

El Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI), en un comunicado en enero, dijo que “las políticas macroeconómicas prudentes, las importantes reservas previas a la crisis (principalmente depósitos del Gobierno) y la asistencia financiera externa ayudaron a la economía nicaragüense a recuperarse de una prolongada contracción en 2018-2020, provocada por la crisis sociopolítica de 2018, dos fuertes huracanes en 2020 y la pandemia”.
Y agregó: “El PIB real creció 10.3 por ciento en 2021 y se proyecta que en 2022 habrá crecido 4 por ciento, gracias a la demanda externa, las remesas y los altos precios de las exportaciones de materias primas”.